TRATAMIENTO DE FERTILIDAD JUNTO CON PSICOLOGO

Recomiendan acompañar el tratamiento de fertilidad con un psicológico

La infertilidad es una de las experiencias emocionales más difíciles y dolorosas de la pareja e independientemente de quién tenga la dificultad para concebir, el problema afecta a ambos porque la sociedad no prepara a las personas para la idea de no poder tener hijos. Por eso, recomiendan que este tipo de tratamientos sea acompañado por una ayuda psicológica.

El acompañamiento psicológico es una de las herramientas recomendadas por los especialistas para apoyar y orientar a las parejas a vivir su tratamiento de fertilidad con expectativas reales.

La infertilidad es una de las experiencias emocionales más difíciles y dolorosas de la pareja e independientemente de quién tenga la dificultad para concebir, el problema afecta a ambos porque la sociedad no prepara a las personas para la idea de no poder tener hijos. Darío Fernández, psicólogo especializado en medicina reproductiva, sostuvo que "la infertilidad pone a prueba muchos aspectos de la pareja como la comunicación, la empatía, la tolerancia y el apoyo emocional".

Fernández quien integra el equipo del Centro de Estudios en Ginecología y Reproducción (Cegyr) opinó que "atravesar esas situaciones hace que a largo plazo la pareja se fortalezca", al agregar que "es un mito que en los matrimonios con problemas de infertilidad la tasa promedio de divorcios sea mayor". "Por el contrario, las parejas se apoyan, crecen y comparten sus sentimientos afianzando y profundizando su relación", explicó el especialista.

Pero reconoció que a la hora de encarar un tratamiento de fertilización asistida "es necesario el apoyo psicológico para que la pareja pueda vivir el tratamiento de fertilización con niveles más bajos de tensión, reduciendo factores de estrés y preparándose para cada etapa del tratamiento y sus posibles resultados".

Fernández acotó que "ese acompañamiento es aún más necesario todavía cuando hay malestar en la pareja y en los casos de receptores de óvulos y/o espermatozoides, donde la ayuda psicológica es obligatoria". "Se aborda el asesoramiento a los pacientes sobre los aspectos psicológicos implicados en el modo de formar una familia y también hay un replanteo sobre conceptos de qué es ser padre y qué es ser madre", explicó y precisó que se puntúan hechos como por ejemplo "que la personalidad se conforma en la crianza y no viene predeterminada por la herencia genética".

El acompañamiento psicológico permite según sostienen los especialistas, potenciar la comunicación y la empatía. Ese asesoramiento brinda a la pareja recursos de adaptación al tratamiento para que conozcan y acepten sus límites y las posibilidades, de sufrir estados de alteración en el humor que suele modificarse por la toma de medicamentos y de hormonas. Fernández dijo que "las dificultades que atraviesan las familias con infertilidad que tienen a sus hijos por un método de reproducción asistida o adopción, hacen que esos padres dediquen mayor cantidad de tiempo a la crianza de sus hijos, fortaleciendo más los lazos familiares".

Por su parte, la psicóloga Diana Guerra del Instituto Valenciano de Infertilidad (IVI) de Barcelona, opinó que "cada embarazo es una historia distinta" y señaló que "los cambios emocionales se manifiestan durante el primer mes donde hay alteraciones en la sensibilidad de la mujer". Reconoció que "un factor estresante en la fertilización asistida es la donación de gametos, que ocasiona una inestabilidad emocional muy importante que hace que deba recurrirse a un apoyo psicológico".

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