"Me siento feliz y orgullosa de poder ayudar a que otras mujeres sean madres"

"Me siento feliz y orgullosa de poder ayudar a que otras mujeres sean madres"

Con su libro "Voy a ser madrea a pesar de todo", Marisa Brelse convirtió en portavoz de las parejas que sufren el problema de la infertilidad. A días de presentar su trabajo en los Estados Unidos, nos concede una entrevista exclusiva en la que cuenta cómo vive ésta experiencia.


- Marisa, tu libro es un éxito rotundo: va por la cuarta edición y acaba de salir a la venta en la tienda Barnes&Noble de EEUU, ¿cómo lo vivís vos teniendo en cuenta que hoy, miles de personas están leyendo el relato de una experiencia tan íntima y personal?

Estoy feliz. Escribirlo fue muy movilizador para mí porque tuve que ir a lugares del corazón donde había mucha angustia, mucho dolor y muchas frustraciones. Fue como volver a vivir toda esa experiencia dolorosa. Pero cuando lo terminé, sentí que había sido un proceso sanador en el que logré abrirme y contar todo: desde embarazos que no fueron hasta la historia de mis padres. En este último caso, lo hice porque tenía una relación ya que pude contar las dificultades que tuvieron mis padres para tenerme en una época en la cual, la ciencia no te daba la posibilidad de hacer una in vitro. Hubo quienes me preguntaron ¿era necesario que hablaras de tus papás? Y yo digo que sí. Sentí la necesidad de hacerlo y sé que ellos me entienden.

- ¿Y cómo tomás las críticas o cuestionamientos que puedan hacer sobre un libro en el que hablás de vos, tu historia y la de tu familia?

La verdad es que por la vida espiritual que elijo tener, no me preocupa. No trabajo por la aceptación de los demás sino que lo hago por mi propia aceptación y nada más. No tengo que darle explicaciones a nadie aunque sé que muchas de esas críticas las hacen con buena voluntad, sin maldad. Pero es mi vida y hago lo que siento, siempre, en todas las áreas de mi vida.

- Hoy sos considerada una referente para aquellas mujeres que no pueden concebir en forma natural, ¿eso te genera presión?

No, estoy muy orgullosa. En el día a día vivo como en una especie de consultorio virtual. Muchas mujeres me escriben contándome sus problemas, sus dudas, quieren saber cómo logré salir adelante sin bajar los brazos. Creo que lo que yo estoy haciendo con este tema y a través del libro es brindar un servicio. La infertilidad es un tema súper delicado y mucha gente no lo entiende. Es así: si no lo viviste, no lo entendés. Podrás solidarizarte pero nada más. Por eso me pone tan feliz ejercer este rol, que Daniel Scioli me haya puesto ante todo Buenos Aires como una abanderada del tema para despertar conciencia sobre la infertilidad, es un gran honor. Intento transmitirle a la gente que es una enfermedad, que tiene cura, que se trata, que no hay que tener miedo y que se debe hablar naturalmente como a otros que lamentablemente les toca un cáncer o una diabetes.

- Además, tu libro ayudó a que se sancionara una ley en Provincia.

La cosa fue así: yo presenté el libro el 5 de octubre y ahí se me acercó en forma anónima el diputado Raúl Pérez. Yo no lo conocía. Se presentó, me dijo que quería conocerme porque se había enterado de la existencia del libro y él había presentado en provincia un proyecto de ley para que todas las personas que sufrían esta enfermedad pudieran ser tratadas en forma gratuita. ¡Casi me desmayo! Porque realmente para mí, esa posibilidad era una utopía, especialmente en un país en el que muchas obras sociales te cubren una cirugía estética pero no un in vitro, realmente un locura. Ahí me empecé a involucrar, le pedí al diputado que me dejara ayudar desde mi lugar en los medios, difundiendo el mensaje. Al mes y medio pudimos (y lo digo así porque me siento parte de este gran logro) sacar una ley para la provincia de Buenos Aires, la ley dice que la persona que actualmente sufra este problema, puede ser atendido en forma gratuita.

- La cuestión del dinero es un factor importante para las personas que sufren el problema de la infertilidad, ¿no es cierto?

Es terrible, porque además de sufrir por no poder tener un hijo tienen que sufrir el hecho de no poder costear el tratamiento. Hay que soportar frustraciones, problemas de pareja y encima, de dinero. La verdad, es muy delicado. Además es importante aclarar que con un tratamiento muchas veces no alcanza. Por desconocimiento muchos piensan que lo hacés una vez y ya está, pero no siempre es así. En mi caso, yo hice 10 intentos y si no hubiera tenido la ayuda del doctor Pascualini, en ese momento no hubiera podido hacer ninguno. Sinceramente, él me apoyó y me ayudó porque a veces se tiene la fantasía de que los que trabajamos en la tele somos millonarios, pero esto no es así. Y como yo, hay miles de personas.

- ¿Qué le dirías a esas parejas que están pensando iniciar un tratamiento de este tipo?

Que el deseo de ser padres debe ser de a dos. Deben saber que es un camino en el que se debe tener paciencia, amor, apoyo mutuo. Es un proceso que involucra tanto lo psicológico como lo emocional y la contención. El hombre se convierte en una especie de sostén dentro de la pareja. En mi caso, sin la contención de mi marido, yo sola no hubiera podido. Capaz hay mujeres que sí lo logran, pero no. Para mí el amor, la tolerancia y la fe en la ciencia en fundamental.

- ¿Hasta dónde te gustaría llegar con tu libro?

Con este libro colaboré abriendo el tema en la sociedad, sacar una ley provincial muy importante… ahora voy por la Nacional, no me para nadie. Hasta no llegar a plantearle el tema a la Presidenta no paro. Además, voy a iniciar una gira por Latinoamérica y en marzo presento el libro en Miami… en Estados Unidos se empezó a vender en versión digital para la tienda Barnes&Noble, (N.d.R: aunque ella no lo diga, se convirtió en la primera escritora argentina en tener un libro en este formato), lo que me hace dar cuenta de la importancia que se le está dando al tema.

- ¿De dónde sacás tanta energía?


Soy así, no paro. Ahora también voy a empezar un programa para la mujer que tiene que ver con todo este proceso que atravieso. Un ciclo que tenga que ver con la fuerza y la importancia de la mujer. Soy muy organizada y tengo un motor interno que lo alimenta la pasión que tengo por lo que hago.

- ¿Te gustaría tener otro hijo?

Sí, obvio. Pero ahora siento que el ibro es como un hijo de papel y si me embarazara ahora, capaz me sentiría un poquito frustrada por tener que parar todo lo que me va surgiendo por el libro que para mí es un orgullo muy grande. Pero no lo descarto, habrá que ver qué pasa cuando termine toda la gira.

- Por último, ¿cómo vive Paloma, tu hijita, todo lo que sucede con el libro? En definitiva, cuenta su historia.


Ella lo vive con mucha naturalidad porque desde bebé que escucha hablar del tema. Nunca le diría “no sabés lo que luché para tenerte” porque sería ponerle un peso muy fuerte, pero sí sabe que es una hija que deseamos con el alma y que gracias al doctor Pascualini, a quién ella conoce y adora, con su papá pudimos tenerla. Sí le aclaré para que ella no tuviera dudas es que la tuve en mi panza y que fuimos muy felices cuando supimos que venía. Ella no me pregunta pero creo que cuando tenga dudas, lo hará. Sabe del libro y si le preguntás, te va a decir que en él se cuenta cómo llegó ella al mundo y se ayuda a que otras personas también puedan tener bebés.

¡Muchas gracias Marisa!

Entrevista: Daniela Brea


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